Articulo publicado en el Blog:
La Hermandad se siente orgullosa de tener unas magnificas cuadrillas de costaleros -para nosotros las mejores- que portan a nuestros Sagrados Titulares cada noche de Lunes Santo. Magistralmente dirigidas por nuestro hermano Antonio Santiago y su equipo de auxiliares.
El articulo se refiere a un hecho acaecido en la Semana Santa de 2008, que capataz y cuadrilla supieron solventar con una maestría absoluta.
En homenaje a ellos y para darle la mayor difusión entre todos nuestros hermanos, publicamos este magnifico artículo aparecido en este Blog.
LAS PENAS EN PLACENTINES
Hay lugares, olores,situaciones o momentos que en ocasiones traen a la memoria algún recuerdo concreto vivido. Los sentidos parecen activarse e incluso la memoria hace persivir olores de ese momento concreto revivido o recordado.
La vivencia que a continuación intento detallar, viene a la memoria de muchos de los que tuvimos la fortuna de vivir este momento cada vez que pasamos por la estrechez de la calle Placentines,incluso llegando a persivir el olor a incienso al esperar el relevo en la puerta del palacio arzobispal con la ya noche cerrada de lunes santo.
Hecho el relevo, enfilamos con el palio para entrar en la calle Placentines a los sones de Amarguras con ese toque reposao mu de Tejera y que pocas cuadrillas son capaces de coger el compás. Sin dejar el elegante son de este palio íbamos caminando mu poco a poco, sin prisas.
El azar quiso examinar a esta cuadrilla y su capataz y colocó el saliente de un cable de la obra de una casa situada en el lado izquierdo de la calle en sentido Francos. Palio milimétricamente y magistralmente mandado sin tocar,acariciar ni rozar en ningún balcón, padeció la mala fortuna de enganchar el saliente dichoso en uno de sus candelabros de cola.
- Antonio :"pararse ahí..!! " " venga de frente un poco.. bueno, pararse ahí" .
"Tranquilos, que no pasa ná" " no moverse uds"...
- Antonio: "Javier !!!(contraguia) dile a Pepín que no deje de tocar"
- Javier (contraguia): "¿Que deje de tocar?"
- Antonio: "Que no deje de tocar!!"
- Javier (contraguia): " Pepín... no deje..."
.... tachán..!!!!! y Pepín como si un desarme o enganchón en medio de una faena en la maestranza se hubiera producido manda parar la música.... tsssss vaya tela...!!!!
- Antonio: "Bueno tranquilos", "no moverse uds por favor"
- Cuadrilla: "Antonio tranquilo que estamos aquí pa lo que haga falta,no bajes el paso..."
- Antonio: " Bueno, que se salga el corriente de la última.."
- Cuadrilla: "vamo Barba, tranquilo miarma"
- Antonio: " agarrate al varal y subete en el costero para desenganchar el cable"
- Barba: " Alfonso lo siento tengo que subirme encima del costero"
- Cuadrilla: " Barba tira pa´rriba que aquí estamos tós, sube sin problemas"
En estos pocos e interminables minutos que transcurre esto que se narra, jamás he visto una cuadrilla más unida, más firme,más concentrada en el trabajo, donde todos y cada uno de nosotros sabia el papel que desempeñar... no moverse apretando los dientes y fijos como una columna de hormigón,empujando con las manos pa´lante. El paso no se movía, no respiraba, no había movimiento alguno en el techopalio...
- Antonio: "bajate y metete en el palo tranquilo"
- Antonio: " ¿ya esta metio?
- Cuadrilla: listo! cuando tu quieras Antonio...
Pepín Tejera ordena que esto merece los sones de Amarguras y cuando comienza el compás de la marcha donde se presenta la omnipotencia de Cristo, Antonio manda el "venga de frente". El paso sale caminando como si toda la cuadrilla tuviera el pie izquierdo levantado esperando la orden para salir andando, sale elegante, sale sin dudas,sale al compás de la música, sale decidido, sale como si el paso, este palio,no lo hubiéramos tenido 4 o 5 minutos encima cuesta arriba y parado como un mimos... sale dominado por un cuadrillón del que me siento cada día más orgulloso de pertenecer.
Qué difícil es disfrutar de estos momentos, qué difícil es entender que sólo los maestros son capaces de hacer disfrutar a su cuadrilla superando los contratiempos y las dificultades.
Publicado por Jorge Mateos en eltoreoesgrandeza.blogspot.com
Esta placa de distinción se suma a las que ya figuran en nuestra Sala Capitular en recuerdo de nuestros hermanos Antonio Pantión Pérez y Domingo Bellido Vázquez.
Probablemente la Hermandad de las Penas no se podría hoy por hoy entender sin Juan Carrero. Para reconocer la dimensión exacta de sus contribuciones a esta Hermandad, habría que analizar pormenorizadamente su historia en los últimos 50 años, sin hablar de la contribución que como incansable investigador ha realizado a la Semana Santa de Sevilla.
Un profundo investigador, maestro y diseñador de cualquier ámbito de las Hermandades, profundo conocedor de la Semana Santa de Sevilla, siempre honesto con sus pensamientos y siempre presto a enseñar y mostrar su docta opinión sobre cualquier ámbito de nuestras Cofradías.
Esta Hermandad ha querido colocar esta placa en su Sala Capitular para mantener el espíritu de JUAN CARRERO siempre presente, y como distinción y para que sea recordado para la posteridad, reconociendo y premiando su labor y dedicación, para el beneficio de esta Corporación y de la Semana Santa de Sevilla.
De JUAN CARRERO se podrá decir siempre, como en un conmovedor verso, “que su corazón no ha latido en vano”… 
Tres cofradías y un solo barrio. Llegar hasta la parroquia de San Vicente un Lunes Santo para ver a las Penas puede convertirse en una carrera de obstáculos. La Vera-Cruz a un lado, el Museo por otro, hacen de este enclave un espacio casi inaccesible. Cuando al fin se llega, alguien se percata de que se ha dejado medio tobillo en el intento (a lo que ayuda el empuje de algún carro de bebé). +reducida.jpg)
