miércoles, 27 de mayo de 2009

Intenciones MISA DE HERMANDAD de los Lunes

JUNIO 2009 8 de junio, 20:30 horas: N.H. D. BERNARDO JOSE BOTELLO GOMEZ (q.e.p.d.). 15 de junio, 20:30 horas: N.H. D. JUAN CARRERO RODRIGUEZ (q.e.p.d.). Aquellos familiares que deseén aplicar las intenciones de la Misa de Hermandad por alguno de nuestros hermanos, tienen que ponerse en contacto con el Diputado de Cultos, Samuel Fernández Santizo, que podrá atenderlos cualquier lunes antes de la Misa de Hermandad. Esta Hermandad tendrá siempre en el recuerdo a los hermanos que nos dejaron definitivamente para acudir a la llamada de Dios Padre.

lunes, 25 de mayo de 2009

MEMORIA DE LA HERMANDAD 2008-2009

Os publico en el Blog de la Secretaría la Memoria de la Hermandad del ejercicio 2008-2009, que aparecerá publicada en el próximo Boletín de la Hermandad nº 132.

Esta memoria se dió por leida por todos los hermanos asistentes al Cabildo General Ordinario de 15 de junio de 2009. Esta es definitiva tras dos correcciones realizadas por los hermanos.

Memoria del ejercicio 2008-2009

martes, 19 de mayo de 2009

N.H. D. JOSE CARLOS ORTA CUEVAS pregonó a la Virgen del Rocio


Simpecado de la Hermandad del Rocio Macarena

La Parroquia de San Gil Abad acogió al pasado domingo 10 de mayo el XX Pregón de la Hermandad del Rocío de la Macarena, una cita organizada por la Corporación rociera de Sevilla-Macarena.



El templo se llenó para presenciar la cita, que contó con la asistencia del Párroco de San Gil Abad, el presidente del Consejo Gral. De HH y CC de la ciudad de Sevilla, y una amplia representación de la Junta de Gobierno de la Hermandad de Las Penas encabezada por su Hermano Mayor D. Antonio Pineda Capmany.



Junta de Gobierno de la Hermandad del Rocio, Hermano Mayor de Las Penas
y familiares del pregonero, junto a amigos y hermanos del Rocio de la Macarena




En esta ocasión nuestro querido hermano José Carlos, hermano mayor que fue de esta Hermandad de Las Penas, descubrió su otra devoción que tributa desde hace muchísimos años a la Santísima Virgen en su advocación del Rocio.

En un altar presidido por el Simpecado de la Hermandad del Rocío de la Macarena, daba inicio un pregón, en el que José Carlos Orta fue presentado por el anterior pregonero de la Hermandad D. Antonio Neyra Bejarano, tras la cual José Carlos declamó magistralmente un pregón escrito sobre sus propias vivencias rocieras, que sorprendió a los asistentes por su magnífica calidad y su puesta en escena, que llegó y emocionó a todos los hermanos, amigos y familiares que allí se congregaban.




Durante su intervención, el pregonero recordó sus inicios de la devoción hacia la Virgen del Rocío, recordando a rocieros macarenos ya desaparecidos, y dada su reconocida y gran pasión por el mundo del Caballo, que lo acompañó durante muchos años como compañero de peregrinación hacía la Ermita de la Virgen del Rocío, leyó una magnifica elegía al Caballo que levantó una emocionada ovación de todos los asistentes.



Ya en la recta final del acto, todos los asistentes tributaron una gran ovación al pregonero, entregando el Hermano Mayor de la Hermandad, D. Jesús Reina Sousa, un obsequio de la Hermandad del Rocío de la Macarena en recuerdo de este día.





Presidente del COnsejo de HH y CC, Junta de Gobierno de la Hermandad
del Rocio de la Macarena, junto al pregonero

Previamente, y en un salón de la Casa de Hermandad del Rocío de la Macarena, los oficiales de la Junta de Gobierno de la Hermandad de Las Penas en su nombre propio, le hicieron entrega de un “jarrillo de plata” realizado y grabado por Manuel de los Rios , en recuerdo de este día.








Una vez terminado el acto el pregonero fue efusivamente felicitado por todos los asistentes, realizando las pertinentes fotografias en recuerdo de este día tan feliz para José Carlos.


 Hermanos de las Penas con el pregonero en la Capilla de la
Hermandad del Rocio de la Macarena


El pregonero con su familia

Hermano José Carlos, enhorabuena por el magnifico pregon que nos ofreciste!!!

Fotos: Domingo Pozo

lunes, 18 de mayo de 2009

Las nazarenas pueden 'pasar' de los cabildos

Publicado por El Correo de Andalucia el 17.5.2009 José Gómez Palas “Mi consejo para las cofradías que aún no aceptan nazarenas es que cumplan, acaten y ejecuten las normas dimanadas de la autoridad eclesiástica. El cabildo general de una hermandad no tiene nada que decir”. Así se expresa el delegado episcopal de Asuntos Jurídicos, Teodoro León, cuyo dictamen a Las Penas podría “crear cierta jurispridencia”. El informe jurídico del Arzobispado en respuesta a la consulta elevada por la hermandad de Las Penas de San Vicente sobre el debate de las nazarenas no deja resquicio a la duda:“Teniendo en cuenta que el referido derecho a la igualdad y no discriminación por razón de sexo es irrenunciable e indisponible, no puede establecerse por Regla ni ser acordado lo contrario a este derecho por ninguno de los órganos de la hermandad y cofradía”. En declaraciones a este periódico, el autor de este informe, Teodoro León, advierte de que los cabildos generales sobre nazarenas “no hacen falta, ni tienen ni por qué decidir que sí”, ya que resultaría una “aberración” que un órgano de una cofradía sometiese a discusión “un derecho que le es propio y debido” a las hermanas. “¿Cómo convocamos un cabildo para que decida sí o no respecto a algo que está establecido por la misma ley?”, se pregunta el delegado episcopal de Asuntos Jurídicos.Teodoro León asegura que el dictamen solicitado por la hermandad de Las Penas de San Vicente –de resultas del cual la cofradía del Lunes Santo ha reconocido la plena igualdad de derechos de las hermanas sin necesidad de celebrar un cabildo general– tiene la categoría de “informe jurídico particular”, si bien, aclara, “puede crear cierta jurisprudencia en el sentido de que si una mujer va a pedir la papeleta de sitio a su hermandad, se le niega y ésta recurre, la respuesta va a ser la misma”. En este sentido, el delegado episcopal insta a las juntas de gobierno de las cinco cofradías que aún mantienen el veto a la mujer nazarena en sus Reglas (El Amor, la Quinta Angustia, el Silencio, el Gran Poder y el Santo Entierro) a “que cumplan, acaten y ejecuten las normas dimanadas de la autoridad eclesiástica”. “El cabildo general no tiene que decir nada, es la junta de gobierno la que debe ejecutar las normas en vigor, que son de rango superior”, insiste León. “Cuando una hermana solicita su papeleta de sitio para participar en la estación de penitencia, lo que está pidiendo es un derecho que le es propio y debido. En el caso de que no se la den, esa hermana puede emprender un recurso jerárquico ante la autoridad eclesiástica, y si la hermandad continúa por no aceptarlo, ante el Consejo Pontificio para los Laicos”. Teodoro León recuerda que las Reglas de aquellas hermandades que no incluyan en su articulado la participación de las hermanas en la estación de penitencia no serán aprobadas, algo que “las hermandades conocen de sobra”. El de Las Penas de San Vicente no ha sido el primer caso en el que una hermandad ha aprobado la igualdad de derechos sin oír el pronunciamiento de su cabildo general. Ya en el año 2001, la cofradía de Los Servitas asumió de motu proprio la plena igualdad entre sus hermanos después de elevar una consulta al Arzobispado, como en este caso. FUNDAMENTOS DEL INFORME DE PALACIO PUBLICADO POR EL CORREO DE ANDALUCIA el 17.5.2009 EL DERECHO DE LAS HERMANAS A PARTICIPAR EN LA ESTACIÓN DE PENITENCIA ¿Puede negarse a las hermanas, tras la promulgación de las Normas Diocesanas para Hermandades y Cofradías, de 8 de diciembre de 1997, y la Exhortación Pastoral a las Hermandades y Cofradías y a todos los fieles de la Diócesis, de 12 de octubre de 2001, el derecho a participar en la Estación de Penitencia? Las Normas Diocesanas, que son de rango superior a las Reglas por las que se rigen las Hermandades y Cofradías, no solo no contienen disposición alguna en la que sustentar la pervivencia de cualquier discriminación entre los hermanos por razón de sexo, sino que al explicitar radicalmente el status jurídico de las hermanas, principalmente en su Artículo 24, establecen ciertamente la igualdad de derechos de los hermanos de ambos sexos. Y no podía ser de otra manera, por cuanto las Normas Diocesanas no pueden contradecir los principios doctrinales y jurídicos universales de la Iglesia. Cuando el Código de Derecho Canónico establece, en efecto, que “por su regeneración en Cristo, se da entre todos los fieles una verdadera igualdad en cuanto a la dignidad y acción, en virtud de la cual todos, según su propia condición y oficio cooperan a la edificación del Cuerpo de Cristo (c. 208), está recogiendo literalmente un texto de la Constitución Lumen gentium (cf. LG 32, c) del Concilio Vaticano II, que está precedido por este otro: “No hay en Cristo y en la Iglesia ninguna desigualdad por razón de la raza o de la nacionalidad, de la condición social o del sexo” (LG. 32, b). Recogiendo este principio de igualdad y no discriminación, el Artículo 24 de las Normas Diocesanas establece en su párrafo primero que “cualquier bautizado que no esté legítimamente impedido por el derecho puede ser hermano de una Hermandad y Cofradía”, derecho general y fundamental de no discriminación, que completa el párrafo tercero al encomendarse a las Reglas la especificación de las “obligaciones y los derechos de los hermanos”, término que ciertamente incluye a los hermanos de ambos sexos, dotándoles de un estatuto como algo que le es propio y debido, no como concesión graciosa o concesión meramente coyuntural. El párrafo segundo del mismo Artículo aplica expresamente y pone de relieve, a modo de ejemplo y por especial significación, el derecho a la igualdad y no discriminación a la participación con voz y voto, tanto activo como pasivo. A mayor abundamiento, debemos tener presente la Exhortación Pastoral a las Hermandades y Cofradías y a todos los fieles de la Diócesis, de 12 de octubre de 2001, en la que el legislador diocesano expresa su voluntad explícita de aclarar las palabras de la referida norma por sí ciertas: “Cuando en el año 1997 publicábamos las nuevas Normas Diocesanas para las Hermandades y Cofradías, no consideramos necesario descender explícita y pormenorizadamente a las consecuencias que la plena integración de las hermanas en la vida de las Hermandades y Cofradías comporta, pues lo dábamos por aceptado y asumido, como así lo es en verdad, por la práctica totalidad de las mismas. No obstante, hay quien me ha solicitado que manifieste mi parecer sobre este tema. A ello respondo con las palabras del Concilio Vaticano II: `no hay en Cristo y en la Iglesia desigualdad por razón de la raza o de la nacionalidad, de la condición social o del sexo´(LG 32). Desde mi responsabilidad pastoral exhorto, por consiguiente, a que se reconozca la plena igualdad de derechos de los hermanos y las hermanas de nuestras Hermandades y Cofradías”. En consecuencia: 1. Cada vez que las Normas Diocesanas mencionan o hacen referencia a las obligaciones y los derechos de los hermanos, lo hacen refiriéndose a los hermanos de ambos sexos sin que pueda establecerse, por consiguiente, discriminación alguna por razón de sexo, en las obligaciones y derechos de los miembros de una Hermandad y Cofradía. 2. Teniendo en cuenta que el referido derecho a la igualdad y no discriminación por razón de sexo es irrenunciable e indisponible, no puede establecerse por Regla ni ser acordado lo contrario a este derecho por ninguno de los Órganos de la Hermandad y Cofradía. Teodoro León Muñoz Delegado Episcopal de Asuntos Jurídicos de las Hermandades y Cofradías

viernes, 15 de mayo de 2009

LA JUNTA DE GOBIERNO RECONOCE LA IGUALDAD DE DERECHOS Y OBLIGACIONES EN LA TOTALIDAD DE LOS AMBITOS DE LA HERMANDAD, SIN DISTINCION POR RAZON DE SEXO

A TODOS LOS HERMANOS DE LA HERMANDAD DE LAS PENAS Estimado hermano en Cristo: En nombre del Hermano Mayor y de la Junta de Gobierno de esta Hermandad, te comunico con verdadera satisfacción para esta Junta de Gobierno, el acuerdo adoptado por unanimidad de los oficiales reunidos en Cabildo de Oficiales, por el que se reconoce la igualdad de derechos y obligaciones de todos los hermanos, sin distinción alguna por razón de sexo, en todos los ámbitos de la Hermandad incluida la Estación de Penitencia. Como todos saben el día 31 de Diciembre de 1997 entraron en vigor las Normas Diocesanas para Hermandades y Cofradías promulgadas por decreto del Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal-Arzobispo de Sevilla. Desde esta fecha la Hermandad ha estado en un periodo de reflexión sobre el tema de la salida en la Estación de Penitencia de las hermanas, que era el único ámbito donde este colectivo no tenía igualdad con los hermanos varones, porque no había una reivindicación importante del colectivo de hermanos al respecto. Estaba en el plan de esta Junta de Gobierno solucionar esta situación durante los cuatro años de su mandato, escuchando a todas las partes para así poder proponer la mejor solución para nuestra Hermandad. Pero al inicio del periodo un grupo de hermanas solicitaron una reunión con el Hermano Mayor expresándole su voluntad al respecto de la igualdad de derechos de las hermanas en cualquier ámbito de la Hermandad. Posteriormente le entregan un escrito acompañado de las firmas de un colectivo importante de hermanos solicitando un Cabildo Extraordinario. En vísperas del pasado Lunes Santo otro grupo diferente de hermanas se dirige al Hermano Mayor expresándole la total disconformidad con la manera de actuar y proceder del grupo de hermanos anteriormente citados, pero le pedían la igualdad de derechos de todos los hermanos en todos los ámbitos de la Hermandad, rogándole que la Junta de Gobierno solucionara este tema. Una vez analizada la situación de la Hermandad y observando que en estos momentos si existía un movimiento importante en el seno de la misma hacía la participación de las hermanas en la Estación de Penitencia, es por lo que esta Junta de Gobierno decide estudiar las acciones oportunas y el procedimiento adecuado para resolver esta situación de acuerdo a la normativa de la Autoridad Eclesiástica y a lo que regulan nuestras Reglas. Como ha existido en el seno de las Hermandades un debate importante en estos últimos años desde la promulgación de las Normas Diocesanas en el año 1997 y del Exhorto Pastoral del 2001, esta Junta de Gobierno decidió solicitar un dictamen jurídico al Delegado Episcopal para Asuntos Jurídicos de las HH y CC del Arzobispado de Sevilla, sobre la situación de nuestras Reglas actuales. Una vez recibido el dictamen jurídico y analizado su contenido, esta Junta de Gobierno decidió el pasado día 12 de mayo reunida en Cabildo de Oficiales, hacer una adaptación de las actuales Reglas de la Hermandad a las Normas Diocesanas de 1997, y por lo tanto ejecutar todos los principios recogidos en el citado informe jurídico atendiendo a las normas promulgadas por la Autoridad Eclesiástica. Por ello, y entre otras cosas a adaptar de las actuales Reglas, a partir de este momento las hermanas de esta Corporación tendrán los mismos derechos y obligaciones en cualquier ámbito de la Hermandad, incluida la Estación de Penitencia. Esta Junta de Gobierno quiere dejar claro que esta decisión no es un derecho que le otorga al colectivo de hermanas, sino un derecho que les reconoce en función a las normas establecidas por la Autoridad Eclesiástica y otras normativas del ámbito civil, y así lo expresa taxativamente el dictamen jurídico del Delegado Episcopal. Por ello entiende y así interpreta, que ningún órgano de la Hermandad puede establecer, ni acordar lo contrario, a este derecho que les corresponde por ley y es irrenunciable e indisponible, y por lo tanto lo único que hace es cumplir, acatar y ejecutar las normas dimanadas de la Autoridad Eclesiástica. Así mismo quiero informarte, que en el mismo Cabildo de Oficiales se ha decidido crear una comisión que vaya trabajando en la elaboración de unas nuevas Reglas y de un Reglamento de Régimen Interior para adaptar la normativa interna de la Hermandad al siglo XXI. Esta comisión comenzará su labor en el próximo mes de Septiembre de 2009, y una vez tengan terminado el borrador se someterá a la consideración de todos los hermanos atendiendo al procedimiento estipulado en el artículo 134 de las actuales Reglas de la Hermandad. Con la más sincera enhorabuena por esta nueva responsabilidad que a partir de ahora adquieren nuestras hermanas en la vida de la Hermandad y con el deseo de que siempre sea para el bien de la Hermandad y a mayor honra de Nuestro Padre Jesús de las Penas y María Santísima de los Dolores, recibe un fraternal abrazo en Cristo Nuestro Señor. Dios te guarde muchos años. En la ciudad de Sevilla, a 2009 años de la Encarnación de Nuestro Señor Jesucristo, día 13 de mayo. EL SECRETARIO José Antonio Valderrama Pérez. VºBº EL HERMANO MAYOR Antonio Pineda Capmany.