PREDICA: Rvdo. P. Fray Pedro Fernández Alejo, O.SS.T., Párroco de San Ignacio de Loyola y Delegado Diocesano de Pastoral Penitenciaria.
TERCER DIA: TEMA CENTRAL: Encuentro gozoso con el Señor.
● Él se hace presente en la palabra, en su
Cuerpo y en su sangre
● Jesús viene a transmitirnos al verdadero
Dios
● Las desgracias que sufrimos no son castigos
de Dios
● Ante un problema ¿Cómo me acerco al Señor?
● Hay un cinturón de marginación social en
Sevilla.
● Las Hermandades tienen una labor importante
que hacer
“EL SEÑOR ES
COMPASIVO Y MISERICORDIOSO” (Salmo 102)
Si el Señor no fuera compasivo, ¿Qué podría esperar el hombre? Una vida sin esperanza, ¿imaginas? Sería una vida de esclavos, neurotizados por errores y olvidos, por culpas y pecados. Vivir sería un castigo.
Si el Señor no fuera compasivo,
¿por qué tendría que serlo yo? Un mundo sin compasión, ¿imaginas? Honor a los
fuertes, ¡ay de los vencidos! “Los débiles y fracasados deben perecer”
(Nietzsche).
Si Dios no fuera misericordioso,
mejor luchar contra Él. Le condenaríamos por tirano y prepotente, por sádico y
cruel. Cargaríamos a su cuenta ríos históricos de lágrimas y sangre, ¡Ateos
todos del mundo, unid vuestras fuerzas, borrar a Dios de vuestro horizonte
vital!
Si Dios no fuera Padre, si se
pareciera al hijo mayor de la parábola, o al fariseo que reza escupiendo al
publicano, o al que no se deja tocar por prostitutas, o a los que buscan
adulteras para apedrearlas, o al juez que se lava las manos o al rey que se ríe
de su victima, o al amo que azota al criado negligente, o al señor rodeados de
centenares de esclavos; le condenaríamos como al enemigo número uno del género
humano.
Pero Dios es compasivo y
misericordioso, perdona tus culpas y pecados, cura tus heridas y dolencias, te
colma de ternura y de regalos,
Él mismo se regala, Dios-Amor-Regalo.
Se conmueve con el niño cuando
cae, le alza hasta su pecho, hasta su cara, le lleva de la mano en el camino,
le saca de la fosa traicionera. Es amigo y protector, defiende a los pobres y
oprimidos. Nos lleva a todos tatuados en sus palmas.
Dios es el Amor primero, Amor
inmenso. Cada latido de su corazón, cada aliento, una constelación de vida,
lluvia vivificante en los desiertos. Nos hizo a su manera, pequeños dioses de
la tierra.
Nos invita a su banquete, nos
espera; objeto misterioso de todos nuestros deseos.
Un
encuentro Dios mío, te veremos cara a cara, una fiesta por los siglos
comulgando en tus entrañas.
1 comentarios:
Este año el Quinario nos está haciendo sentir cada día un tirón de orejas; precisamente eso que necesitamos, el espejo donde ver nuestra realidad de cristianos timoratos con más apariencia que fondo y que deja al descubierto nuestra necesidad de cambio, de conversión profunda. Jesús de las Penas es misericordioso con nosotros y nos ofrece una nueva oportunidad.
Publicar un comentario